La Disbiosis Intestinal

Para explicar qué es la Disbiosis Intestinal, antes, debemos saber muy bien que es la Microbiota Intestinal y por qué es tan importante para regular nuestra salud… Así que podéis ojear el blog: ¿Qué es la Microbiota Intestinal?. 🤗

Entonces, ¿Qué es la Disbiosis Intestinal?

Como ya sabréis, la microbiota intestinal es un ecosistema único, que puede experimentar cambios en su composición y función debido a modificaciones en la dieta, el estilo de vida, el uso de medicación … Casi todos ellos, factores ambientales que dependen de nuestras decisiones. Cuando estas alteraciones ocurren, pueden desencadenar un desequilibrio microbiano conocido como Disbiosis Intestinal.

La Disbiosis Intestinal puede ser a nivel de: disminución de la cantidad o de la diversidad de microorganismos beneficiosos, que puede dar lugar a un aumento de patógenos oportunistas o a la proliferación de otras bacterias que ya habitan en nuestro intestino, pero que no nos interesan tanto.

Numerosos estudios han asociado la Disbiosis Intestinal con trastornos gastrointestinales, enfermedades metabólicas e inflamatorias, e incluso condiciones psiquiátricas. 😵

¿Cuáles pueden ser las causas de la Disbiosis Intestinal?

Cualquier alteración en la microbiota intestinal puede provocar Disbiosis. Aquí te mostramos algunas de las causas más comunes:

• Cambios en la dieta: Un exceso en el consumo de azúcares refinados, grasas trans o solo de proteínas de origen animal, además de, una dieta rica en productos procesados con fructosa, edulcorantes u otros aditivos alimentarios.

• Exposición a productos químicos o contaminantes ambientales: La ingesta de pesticidas u otros productos químicos que se encuentran en los alimentos, pueden alterar la microbiota. Entre ellos podemos encontrar: metales pesados, bisfenol A (BPA), ftalatos, sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas. Encontrados en los alimentos, los recipientes y la bateria de cocina.

• Consumo excesivo de alcohol: Beber alcohol en exceso puede causar desequilibrios, alimentado el crecimiento de bacterias no deseadas.

• Uso de antibióticos: Aunque necesarios bajo prescripción médica, los antibióticos pueden alterar la microbiota como efecto secundario. Como su nombre indica, son anti- microorganismos vivos, eso implica que pueden afectar también a nuestras bacterias «buenas».

• Estrés y ansiedad: Altos niveles de estrés y ansiedad pueden debilitar el sistema inmunitario, permitiendo un sobrecrecimiento de microorganismos “malos”. Y el aumento de Cortisol, la hormona del estrés, puede afectar al funcionamiento de la motilidad intestinal y la producción de moco protector de las paredes del tracto gastrointestinal, promoviendo la permeabilidad intestinal, el crecimiento de bacterias indeseadas que pueden trasladarse al torrente sanguíneo y producir una inflamación crónica de bajo grado, como mínimo.

• Otras enfermedades subyacentes: Patologías como enfermedades hepáticas, condiciones inflamatorias crónicas, gastritis crónica o hipoclorhidria, diabetes mellitus y obesidad, pueden influir en el equilibrio de la microbiota intestinal, y viceversa.

Todos estos factores favorecen la Permeabilidad intestinal. ¿Y, a qué nos referimos cuando hablamos de permeabilidad intestinal?

En un intestino saludable, las paredes del intestino son específicamente impermeable, es decir, permiten solamente el paso de nutrientes y sustancias esenciales, pero bloquea la entrada de microorganismos y toxinas. Sin embargo, cuando la permeabilidad intestinal está alterada, la barrera del intestino se vuelve más porosa de lo normal, comprometiendo su función protectora, así que, deja pasar toxinas, bacterias y sustancias dañinas hacia la sangre. Por ello, se puede desencadenar una respuesta inflamatoria, problemas digestivos y otras complicaciones de salud.

Síntomas de Disbiosis Intestinal

¿Cómo se si tengo Disbiosis Intestinal?

La disbiosis intestinal es el desequilibrio en los microorganismos y el microbioma que tiene lugar en el aparato digestivo, sobre todo en el intestino grueso. La población microbiana del intestino humano incluye unos 100 billones de bacterias de unas 500 a 1000 especies distintas que conviven en equilibrio, pero el estrés fisiológico continuado puede hacer que ciertos microorganismos potencialmente patógenos crezcan, mientras que las bacterias “buenas” disminuyen. 🦠🦠

Estos son solo algunos de los síntomas que pueden indicar una disbiosis:

Además, cabe destacar que la Disbiosis puede empeorar los síntomas o ser uno de los desencadenantes de múltiples trastornos digestivos relacionados con la ingesta de alimentos. Entre ellos, destacan el síndrome del intestino irritable (SII), la enfermedad de Crohn, la diabetes y la obesidad. Por ello, los signos clínicos de esta condición pueden ser muy variados entre personas.

Efectos Negativos de la Disbiosis Intestinal

Una microbiota equilibrada es clave para una vida saludable, actuando en múltiples frentes para mantener nuestro bienestar general. Cuando el equilibrio falla, surgen alteraciones en múltiples niveles del cuerpo:

Sistema nervioso: Ansiedad, depresión o deterioro cognitivo.

Sistema endocrino: Alteración hormonal y metabólica, como: obesidad, diabetes, hipertensión arterial, hipotiroidismo, hipercolesterolemia, síndrome ovarios poliquísticos (SOP), etc.

Aparato nefrourinario: Aparecen nefrolitiasis, nefritis, etc, y producir enfermedad renal y otras patologías a largo plazo.

Intestino: Principalmente puede provocar la aparición de intolerancias alimentarias a la fructosa, sorbitol, lactosa, y deficiencias graves por malabsorción de vitaminas y minerales esenciales. Además, de favorecer la aparición de síndrome de intestino irritable (SII), enfermedad de Crohn, divertículos, obesidad y diabetes, etc.

Sistema inmune: Puede exacerbar trastornos autoinmunes con alteraciones cutáneas (acné, psoriasis, dermatitis atópica …), digestivas (enfermedad celíaca), otras enfermedades (lupus, enfermedad de Addison, tiroiditis de Hashimoto, enfermedad intestinal inflamatoria, anemia perniciosa …)

Sistema hepático: Dificulta el proceso de detoxificación hepática, promueve una mala gestión de las grasas que puede generar inflamación hepática e hígado graso no alcohólico (EHGNA).

Sistema músculo-esquelético: Promueve el deterioro muscular, fragilidad, sarcopenia, desmineralización ósea y osteoporosis.

Sistema reproductor: Puede manifestarse con la desregulación del SOP y endometriosis, infertilidad, insuficiencia ovárica, síndrome premenstrual y mayores consecuencias clínicas durante la menopausia.

Sistema cardiovascular: Aumenta el riesgo de patologías y accidentes cardiovasculares, aterosclerosis, trombosis, hipertensión arterial, entre otras.

¡Tu salud intestinal es mucho más que una simple molestia digestiva!

La disbiosis puede ser la raíz de problemas como la fatiga constante, el malestar digestivo, la piel irritada, y hasta los cambios de humor que sientes a diario. No tienes que vivir con estos síntomas. Al entender y corregir el equilibrio de tu microbiota, puedes reducir la inflamación y mejorar tu calidad de vida. 👌

Si queréis saber como solucionar la disbiosis, y estás lista/o para decir adiós a estos problemas, ¡no dudes en ponerte en contacto conmigo! 🙋🏼‍♀️